La Revolución Industrial: el concepto y sus características. De trenes y barcos a vapor.

Joseph Mallord William Turner. Rain, Steam and Speed -Lluvia, vapor y velocidad- The Great Western Railway. National Gallery de Londres. 

Es el año 1844. Un óleo sobre lienzo es presentado en sociedad en la Royal Academy de Londres. El cuadro es firmado por Joseph Mallord William Turner y lleva por título Rain, Steam and Speed -Lluvia, vapor y velocidad- The Great Western Railway. Hoy este cuadro está en una de las salas de la National Gallery de Londres. 

La pintura representa una de las primeras locomotoras de la Great Western Railway cruzando el río Támesis en el puente ferroviario de Maidenhead que acababa de ser terminado tras el diseño del ingeniero británico Isambard Kingdom Brunel (1806-1859). 

El protagonismo en el mismo podría estar en la luz. Sin embargo, lo que le trae aquí es la imagen del ferrocarril, algo casi novedoso para el momento. A diferencia de otros pintores de la época, que despreciaban la industrialización y no veían en el progreso industrial temas merecedores de tratamiento pictórico, Turner admiraba la técnica moderna y por ello pinta la locomotora más moderna de su género y el entonces vanguardista puente de Maidenhead. 

El tren de la Compañía privada GWR (Great Western Railway ) para conectar Bristol con Londres;es usado como recurso para representar un objeto a gran velocidad, para desmaterializar la forma en un punto sobre un puente entre Taplow y Maidenhead.La línea desde Paddington en Londres a Taplow se inauguró en 1838.

Turner realizó apuntes del natural y luego creó el cuadro en su taller. Pinta a un tren que corre a lo largo de las vías. El paisaje está definido muy vagamente, como en muchas otras obras de Turner. El pintor recurre a una luz muy intensa que transmite más la emoción que la realidad objetiva. Así logra crear la atmósfera que pretende. A través de empastes se logra reflejar el humo del ferrocarril y el aire mismo. Los elementos sólidos (el tren, el puente) apenas están insinuados, desaparecen en la atmósfera neblinosa e irreal del cuadro. Se difuminan y mezclan la neblina que exhala el agua, la lluvia que pone un velo ante el cielo y el vapor de la locomotora.

Turner usaba una técnica particular con la que obtenía efectos lumínicos cambiantes. Aplicaba los colores rascándolos hasta extraer esquemáticamente del fondo las formas figurativas. Con su particular técnica obtenía este pintor londinense una textura inconfundible. Es un cuadro distinto al estilo paisajístico que había caracterizado al pintor que junto a John Constable son los dos más representativos del romanticismo pictórico británico que había triunfado en el primer tercio del siglo XIX en este país.

Joseph Mallord William Turner. Autorretrato (1799) Óleo sobre lienzo. Tate Gallery 

Turner entró en la Royal Academy of Art con tan solo 14 años siendo aceptado a los 15 por su Presidente, Sir Joshua Reynolds. Aunque podía haber inclinado por la arquitectura su actividad pictórica fue en la que más destacó siendo estimulada por el arquitecto Thomas Hardwick (junior). 

En su juventud aprendió las técnicas de la acuarela en compañía del pintor Thomas Girtin, con quien coloreó varias láminas para ilustrar libros de viaje lo que le llevó a buscar desde los inicios la luz. Los viajes por Europa le hicieron impregnarse de todo lo que en ese momento se hacía por los países que visitaba (Francia, Suiza, algunos Estados italianos,...) . Pero es la naturaleza la que le atrae y atrapa. 

El crítico inglés, John Ruskin, describió a Turner como el artista «que más conmovedoramente y acertadamente puede medir el temperamento de la naturaleza». En sus últimos años, empleó cada vez menos óleos, y se centró en la luz pura, como en Rain, Steam and Speed. Se trata de un cuadro que le acercará al mundo de los impresionistas en los que influyó incluso al mundo de la abstracción. Pero aquí ha venido por ser un prototipo de lo que fue una de las grandes transformaciones de la "revolución industrial" con el uso del vapor, el desarrollo de la ingeniería, de los medios de transporte, del acero nacido de la industria siderúrgica británica, de la iniciativa privada en el mundo industrial, en deninitiva, del triunfo de capitalismo liberal. 

El término "revolución industrial" lo emplearon por primera vez el periodista, escritor, activista político revolucionario, filosofo y marxista francés de ideología comunista Louis Auguste Blanqui, para designar los cambios que había experimentado la industria inglesa a partir de fines del siglo XVIII. 

Más tarde, lo emplean Marx y Engels, para referirse a las consecuencias negativas que habían provocado este fenómeno. Pero lo consagró el historiador inglés Arnold Toynbee en su ciclo de "Conferencias sobre la revolución industrial en Inglaterra". 

El concepto Revolución Industrial define la serie de cambios económicos y sociales que transforman la sociedad europea entre finales del siglo XVIII y mediados del siglo XIX, e indica el gran desarrollo industrial que señaló el triunfo del capitalismo y de la sociedad burguesa en este período. 

Se puede decir que es una revolución en el sentido de que transforma y sustituye las estructuras políticas, sociales y económicas del Antiguo Régimen por otras nuevas en las que priman valores culturales y mentales distintos de los tradicionales. Pero no es una ruptura brusca con lo anterior, sino más bien una evolución acelerada. 

A pesar de ser llamada Revolución se trata más bien de un proceso de crecimiento continuo en el que intervienen las transformaciones de la agricultura y de la población, las innovaciones técnicas y los capitales. Estas innovaciones o inventos son la respuesta a unas necesidades creadas en la sociedad de la época; no son propiamente las causas de la revolución industrial, sino sus elementos visibles, los instrumentos que tienden a satisfacer esa necesidad, facilitando así el desarrollo económico. 

Algunos autores como el británico Eric Hobsbawn, consideran al período de 1.760-80 a 1.815-20 como la "primera revolución industrial" o fase paleotécnica (en oposición a la fase que empieza a finales de siglo, llamada "segunda revolución industrial" o neotécnica); de 1.815-20 a 1.848-50 sería una fase de progreso lento y dificultades en el desarrollo económica por la coyuntura política. social y económica desfavorable; entre 1.850 y 1.872 hay una fase de decidida aceleración y crecimiento económicos que suponen la definitiva consolidación y expansión de la economía capitalista industrial-financiera; y desde 1.873 hay una fase de depresión, superada a fines de siglo por la "segunda revolución industrial", que representa la plenitud del gran capitalismo. 

En definitiva y como resumen la revolución industrial se puede definir como el cambio económico más importante en la historia de la humanidad. Fue un proceso de industrialización lento, que se inició en Gran Bretaña en la segunda mitad del XVIII , que trajo consigo profundas transformaciones económicas , especialmente en el sector manufacturero que se transformará en sector industrial, sociales, ya que se pondrá fin de manera definitiva a la sociedad del Antiguo Régimen para transformarse en una sociedad de clases. 

Esta revolución que parte de Gran Bretaña , y que corresponde con la llamada Primera Revolución Industrial, se manifestará más tarde en otros lugares del continente europeo y una vez triunfado aquí pasa al Norte del continente americano e incluso poco después a Japón. Tras el triunfo de esta primera fase culminado en el año 1870, se inicia otra segunda que abarcó hasta los primeros años del siglo XX.

 Sus características más definitorias están reflejadas indirectamente en el cuadro y son las siguientes: 

1. Aparición de descubrimientos científicos y avances tecnológicos ligados a nuevas fuentes de energía que aplicadas darán lugar a las actividades económicas productivas  que provocan enormes cambios en los en el proceso de producción de bienes y en la economía., alterando igualmente a la estructura social. Aquí lo vemos en el ferrocarril, en el puente , en el uso del vapor. 

2. Transformación de los sectores agrícolas y artesanales, que pasará a activar en este último caso en industrial. 

3. Mayor especialización económica y del trabajo, concretándose en fábricas. 

4. Adquiere cada vez más importancia el sector secundario y terciario, concretamente con el auge de la actividad industrial y el sector servicios, sobre todo, del comercio y de los transportes,  frente al sector primario. 

5. Desarrollo de los mercados, ya que la producción se orientó a la venta en regiones y países lejanos. 

6. Incremento económico constante lo que dará lugar a una acumulación de capital.

Pero para acabar es que  nos fijamos en otra obra de Turner, el pintor romántico británico que es testigo, sin quererlo del nacimiento de una nueva época, la industrial. 

Steam-Boat off a Harbour's Mouth in Snow Storm (1842). Tate Gallery. 

Dos años antes de la obra vista en primer lugar, en 1442, ya había presentado en público un cuadro que hoy está en la Tate Gallery y que lleva por título Steam-Boat off a Jarbour´s Mouth in Snow Storn o Tormenta de nieve: barco de vapor frente a la boca del puerto. La pintura representa un barco de vapor atrapado en una tormenta de nieve.

Turner había investigado las interacciones entre la naturaleza y la nueva tecnología de los barcos de vapor en al menos cinco pinturas en la década anterior. 

El barco de vapor "Ariel" se llamaba anteriormente "Arrow" y se construyó en 1821-1822. En 1837 fue adquirida por el Almirantazgo y rebautizada como "Ariel". La respuesta crítica inicial a la pintura fue en gran medida negativa, y un crítico la calificó de "espuma de jabón y cal". 

John Ruskin , el principal crítico de arte inglés de la época victoriana, escribió en 1843 en su libro Modern Painters que la pintura era "una de las declaraciones más grandiosas del movimiento del mar, la niebla y la luz, que jamás se haya visto". poner sobre lienzo". 

La crítica fue dura con la obra de Turner que se sintió herido por las críticas, repitiendo "espuma de jabón y cal" una y otra vez, y diciendo: "¿Qué tendrían? Me pregunto cómo creen que es el mar. Ojalá hubieran estado en él". Ruskin comentó: "Es así, con demasiada frecuencia, que la ignorancia juzga las obras del genio". Es una obra típica del estilo tardío de Turner. 

Los tintes y tonos de colores de Turner están pintados en diferentes capas de color, y las pinceladas agregan textura a la pintura. Los colores son monocromáticos, solo se presentan algunas tonalidades de gris, verde y marrón, teniendo la misma tonalidad de colores. La luz pálida plateada que rodea el barco crea un punto focal, atrayendo al espectador hacia la pintura. El humo del barco de vapor se esparce por el cielo, creando formas abstractas de la misma calidad que las olas. 

Más recientemente, la historiadora del arte Alexandra Wettlaufer escribió que la pintura es una de las "representaciones más famosas y más oscuras y sublimes" de Turner y otro ejemplo de como el maquinismo estaba ya inserto en plena naturaleza. La revolución industrial había triunfado ya de forma irreversible en Gran Bretaña. Turner fue testigo directo de ese triunfo.